1, 2, 3, Pfistaaaaaaa!!!!

Cerdo. Chancho. Asqueroso. Rata de albañal. Sólo estos calificativos pueden describir la salsa que fue esparcida el sábado pasado por la cancha 14 de la sede Paraisos de Northchamp.
El match comenzó torcido para las gordas, que tras aguantar relativamente bien los primeros 20 minutos, un penal que terminó en gol y un triple grosero error defensivo terminó por dejar el tanteador 0-2 para el equipo. Así nos fuimos al descanso, sin ideas futbolísticas (mal primer tiempo de casi todo el equipo), con muy pocas chances de gol, con varios jugadores más cansados de lo habitual y con el ya mencionado y duro 0-2 a cuestas.
Sin embargo, las caras y las actitudes de los jugadores de amarillo eran más que positivas durante el entretiempo. Frases como "vamos que lo damos vuelta" eran moneda corriente mientras se saboreaba un poco de agua fresca.
De esta manera las gordas lechonas entraron al segundo tiempo con las pilas recargadas. Pasaron cerca de 20 minutos sin demasiadas ideas, pero la sensación de que el equipo rival era flojito atrás se sentía. Parecía que tenía que entrar el primero para entraran los demás. Y así fue.
Primero fue Bidi Carl, quién, tras pase de Gon, logró meter un buen centro para la llegada del Pfistogol, que con una mala definición batió al arquero rival y puso el partido 1-2. Otro partido...
Poco después, tras un piletazo del Gat (piletodra), un centro con MUCHA salsa picante partió del botín derecho de Nach, y fue conectado a la perfección por un solitario Pfisto, inflando la red rival por segunda vez. Ya era empate y parecía hazaña. Pero faltaba uno más...
Cuando parecía que el partido ya no recibiría más emociones, cuando se moría el partido, cuando el empate ya se veía con buenos ojos, llegó él, nuevamente, la figura de la cancha, tras gran pase de Tom, la definición certera de Pfista para hacer estallar el delirio. El grito de gol se esparció por todas las gargantas lechonas, sedientas de salsa (picante, obvio).
En resumen, fue victoria por 3-2, un triunfo que nos deja bien parados en la tabla y bien metidos en la lucha por el campeonato. Todavía falta mucho, pero estas ganas y estos huevos son fundamentales para seguir luchando. A seguir así. ¡Vamos gordas todavía!

Ahh, me olvidaba: ¡Pfistaaaaaaaa!