Descapotable barato y con poca nafta

La verdad que el descapotable de Olave no es tan top como su nombre parece indicar. Fútbol de bajo vuelo (aunque la pelota voló mucho por el área lechona esta mañana) y protestas múltiples fue la receta del equipo rival, que si bien luchó mucho y puso mucha garra, ofreció poco juego en profundidad y generó poco peligro al arco del Cula.
Del otro lado, las Gordas Lechonas, el equipo de la gente. Hoy no fue el mejor día de las gordas, que se encontraron con un partido más cerrado de lo esperado, y que tuvieron que luchar más de la cuenta para quebrar el parabrisas de ese descapotable.
El primer tiempo terminó 0-0, con las gordas empezando mejor con algunas chances, y El Descapotable de Olave emparejando sobre la mitad de la etapa.
A poco de comenzado el segundo tiempo el árbitro del encuentro sancionó un dudoso penal, que Pfista convirtió con una muy buena ejecución, abajo y esquinado (el arquero no salió en la foto). A partir de allí fue una lluvia de centros de Olave, casi todos bien resueltos por la defensa cerda.
Faltando 10 minutos para la conclusión del match, las gordas encontraron el segundo tanto tras una jugada fotuita, tras un mal rechazo de un defensor rival, un buen pase de Tom (que también participó en el pase del penal) y la (nuevamente) certera definición del goleador Pfisto, al mismo rincón que el penal.
Más allá de esto, Olave nunca dejó de buscar (y de romper los huevos). Cerca del final rajaron al 5 rival. La figura del partido fue Tom (aportó orden y presición), aunque hubieron muchos puntos altos.
En líneas generales, un aceptable partido de las gordas, con algunas ráfagas de fútbol y un orden destacable. Pero hay que saber que hay que mejorar mucho si se pretende pelear el campeonato. ¡Vamos gordas!